Hola amig@s, el titular de hoy trata sobre una neglicencia en un hospital, hicierón esperar a un hombre de 61 años por que etaban según ellos "por tener mucho trabajo con las vasectomías".
Muere por un retraso de 10 meses del hospital al tratarle un cáncer.
«No se creía que se fuera a morir. En realidad, excepto cuando le
daban quimio, hasta poco antes de morir estaba fenomenal... Tenía tan
buen carácter. Nos decía: 'No puede ser que tenga lo que dicen.
Esta
gente se ha equivocado'. Sin embargo, el médico le dio entre
seis y nueve meses de vida,
y lo clavó. Mi hija iba a nacer justo en ese lapso... Le hacía mucha
ilusión poder verla, pero no llegó. Ella nació mes y medio después de
morir su abuelo». Y de morir por un
cáncer de vejiga diagnosticado pero no tratado a tiempo.

La Justicia ha condenado al Servicio de Salud de
Castilla La Mancha a indemnizar a la mujer e hijos de
José Ignacio Vidal,
por retrasarse a la hora de tratarle un cáncer de vejiga diagnosticado,
pero no bien enfrentado. «Obviamente, el dinero nos da igual, hemos
perdido a nuestro padre.
Además, nos han ocultado informes y han
intentado colarnos mentiras para justificar sus errores, ha sido muy
triste y lo contamos para que estas cosas no vuelvan a pasar», explica
su hijo,
José Pablo.
El negligente tratamiento que
llevó a la tumba a José Ignacio, empleado de banca de 61 años a su
muerte, tuvo lugar en el Servicio de Urología del
hospital Nuestra Señora del Prado de Talavera de la Reina.
La familia ha sido asistida por el letrado Carlos Sardinero, de
Sardinero Abogados, y por la Asociación del Defensor del Paciente.
El fallecido había sufrido un primer cáncer de vejiga en
2009
que había sido curado satisfactoriamente, y se había ido sometiendo a
las revisiones preceptivas desde entonces. Sin embargo, en enero de 2013
sufrió un desvanecimiento y se le pidió una analítica, realizándosele
un TAC en marzo que confirmó, según certifica el
juzgado de lo Contencioso número 1 de Toledo, que el cáncer había regresado.